Podemos en la medida de nuestras posibilidades de forma interior o exterior, mejorar la eficacia energética de nuestras viviendas cuando vivimos en un edificio de viviendas; exteriormente sería con la intervención en el exterior de la envolvente del edificio mediante la instalación de un nuevo sistema de aislamiento térmico que puede ser de diferentes maneras y dependiendo del mismo los resultados serán unos u otros, y su coste económico también:
· Sistema SATE: placas rígidas de material aislante adheridas al muro mediante fijación mecánica y productos adhesivos, protegiéndolas posteriormente con varias capas de revoco o aplacado fijado al muro. Incrementa un poco el espesor de la fachada.
· Fachada ventilada: se instalan placas de metálicas, resinas, vidrios, piedra natural, etc. Sobre una estructura anclada a fachada que permite la circulación de aires entre el sistema de fijación y el aislamiento térmico; la ventaja es que permite la evacuación del agua sin que afecta al aislamiento; incrementa considerablemente mas el grosor de la fachada entre un 10 a 30 cm según el acabado a elegir.
· Sistema aislante proyectado: sobre la fachada ser proyecta una capa de espuma de polietileno de 30mm es espesor mínimo, posteriormente se protege con pintura de exteriores compatible o elastómero de puliuretano; es interesante para el tratamiento de fachadas medianeras, patios de luces…. Estéticamente tiene un acabado irregular y es preciso protégelo en zonas de tránsito.
· Inyección de aislante en cámara de aire entre el tabique de vivienda y la fachada. Se inyecta espuma o granulas de espuma de poliuretano de baja densidad, celulosa aislante ignifuga, lana de roca o landa de vidrio en forma de bolas de arlita, en la cámara de aires a través de pequeños accesos. No impermeabiliza ni aísla los puentes térmicos estructurales.
· Cambio de ventanas, ya que es uno de los elementos que más perdidas de térmicas sufre. Habrá que tener en cuenta el material del marco, sistema de apertura y cierre, tipo de vidrio.
· Rehabilitar la cubierta si es de teja con los distintos sistemas que hay en el mercado, pero esto da para otro artículo.
Debemos valorar que es lo que más conviene, que tipo de rehabilitación queremos para nuestro edificio, la inversión a la larga se recupera no solo económicamente, porque de deja de malgastar energía para enfiar o calentar nuestras casas, sino también por el impacto medioambiental y el confort interior.
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